Moglie e Marito (Mujer y Marido) es el nombre original
de esta película en la que vemos a una pareja, Sofía y Andrea, al borde del
divorcio intercambiando roles, como poniéndose uno en los zapatos del otro,
para buscar un reencuentro que les posibilite salvar su relación. No es fácil aceptar
y entender el resultado de un experimento científico que planeó Andrea, un
neurólogo estudioso del cerebro humano, y que por error terminó con este cambio
de propósito: "Andrea es Andrea en el cuerpo de Sofía y Sofía es Sofía en el
cuerpo de Andrea". Un tema que desmotiva al espectador ya que se sale del ámbito
de la realidad, pero a medida que avanza el desarrollo del filme puede ir
descubriendo las intenciones de su director Simone Godano, quien aparte de hacer
reír, intenta poner a sus protagonistas bajo el velo del dualismo de género. Así,
Andrea y Sofía van trastocando su identidad e intentando comprender cómo es ese
otro u otra y qué tipo de sensibilidad manifiesta en su diario vivir.
En otras palabras, disocia la mente del cuerpo para tratar de descubrir
cómo se percibe ella en el cuerpo masculino y cómo se siente él en el cuerpo
femenino. No es fácil reconocer esa transferencia de identidad de géneros e
interpretar con libertad esa aceptación de los roles, pero termina siendo
valiosa la lectura crítica de ese discurso. A modo de ejemplo, gana el hombre –Andrea-
en su relación con los hijos porque descubre las razones de ese marcado acercamiento
de ellos a su madre, gana también la mujer –Sofía- quien muchas veces es la culpable de
la incapacidad de los hombres para la realización de muchas tareas en el hogar. No obstante, es notoria la incomodidad de cada personaje en un cuerpo que no es el suyo, en una
profesión que desconoce por completo, y en un diario vivir alterado por la
situación presentada.
Esta comedia romántica del año 2017 es la ópera prima de su director italiano
que se acerca al auto descubrimiento de cada integrante de la pareja, dándole un
valor igualitario a cada uno de ellos y, por lo tanto, reivindicando los valores
femeninos por los que se sigue luchando. Una mirada a los conflictos de la
pareja, a la lucha por el amor y a esa necesidad de “ponernos en el lugar del
otro”.